Jesús Manifestó su Gloria

Recordando algunas imagenes de nuestros hijos en las Fiesta Patrias de Septiembre que ya se nos va.

Este domingo, al cierre de este tan beneficioso tiempo de descanso y de compartir en familia nuestros obispos nos invitan a celebrar a la Virgen, Reina de Chile.

Es ella quien en el evangelio de hoy Jn2, 1-11, en medio de la fiesta de bodas en Cana le dice a Jesús que el vino se ha terminado. Jesús entonces pide que se llenen unas tinajas con agua y las convienrte en vino, el mejor de los vinos. Este episodio en la vida de Jesús, está lleno de simbolismo, en que Jesús nos invita a acercarnos como una intersesora entre nosotros y su hijo Jesús.

Nuestros pastores hoy también recogen de manera especial el llamado de San Pablo en que nos recomienda orar por TODOS los hombres, especialmente por aquellos que detentan el poder ya sea las autoridades, los comunicadores y cada uno de nosotros mismos, porque mientras mayores necesidades tenemos, mas necesitamos de la ayuda de Dios. No importa que estas sean creyentes o no, es Cristo el único camino y Él quiere que todos se salven, y que disfrutemos de paz y tranquilidad.

La historia se escribe en medio de luces y sombras, y hoy en medio de nuestra sociedad nosotros los cristianos católicos estamos llamados a ser testimonio del regalo de la fe que hemos recibido, y por ello brindar a la sociedad el mensaje de Jesús en nuestro tiempo.

En estos días hemos sido testigos de los fuertes ataques de que ha sido objeto el Papa Benedicto XVI, tras dar una clase magistral en la Universidad de Ratisbona. Sus palabras sacadas de contexto, en que el Papa cita una frase del siglo XVI: "Muéstrame qué ha traído de nuevo Mahoma y sólo encontrarás cosas mlvadas einhumanas..."El Papá está abiertamente en desacuerdo con esta frase, y de allí que el ha centrado la fe cristiana en el único absoluto "Dios es amor". No actuar según la razón es contrario a la naturaleza de Dios. Emplear la violencia para tratar de convencer de algo contraría a la razón, y por tanto a Dios. El Pontífice ha repetido su planteamiento contrario al empleo de la violencia en nombre de Dios o de una religión determinada y ha reconocido que todas ellas han caído posiblemente en este error.