domingo, abril 1

Domingo de Ramos


Con la participación del Padre José Ahumada C.S.C. y el nuevo superior de la congregación, Padre Michael DeLaney C.S.C. este domingo en el bosque se celebró el domingo de Ramos con la lectura de la Pasión del Señor(Lc 19, 28-40). Las familias georgianas concurrieron masivamente a esta misa.

Este domingo abre la semana más importante del año litúrgico. Celebramos la Pasión, Muerte, Resurrección de Jesús, en lo que es la puerta de entrada a la semana Santa.
La liturgia de hoy tiene dos momentos muy diversos.
El primero está marcado por el Evangelio de la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén según Lucas, y que escuchamos antes de la procesión de los ramos.
El segundo está centrado en el relato de la Pasión, ya en el centro de la celebración eucarística.
Toda la multitud de los discípulos, llenos de alegría, se pusieron a alabar a Dios a grandes voces.

Este ramo debería ser la señal de que hemos optado por el camino de Cristo, y nos invitan a poner en la entrada de nuestros hogares. Reconocemos a Jesús como nuestro Rey, y estamos dispuestos a seguirlo aún con la pesada Cruz. Los ramos nos reaniman a poner a Jesús en el centro de nuestras vidas y familias.

Como Pedro le dice a Jesús: ¿a dónde iremos?. Morir con Cristo y resucitar con Él.


Es una manera de acercarse a la pasión que, porque invita mucho a la compasión y a las lágrimas, puede fácilmente perderse el significado más hondo del misterio pascual. Ni los evangelistas ni la liturgia pretenden quedarse en la compasión. Lo que pretenden es proclamar la plenitud de la salvación: Tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito (Jn 3, 16).