Reaviven el don que han recibido

Una hermosa Eucaristía tuvimos el domingp 7 de Octubre. La primavera ya se nota por todas partes, y el colegio luce como en sus mejores momentos, adornado además por la presencia de muchas delegaciones que viven la fiesta del deporte y de la convivencia en la Saint George´s Cup 2.007.

La eucaristía, nuestra fiesta de encuentro con el Señor, fue celebrada por el Padre rector, José Ahumada C.S.C., quien nos llamó a vivir el regalo de la familia de manera especial, recordándonos que estos momentos quedan en la memoria de los hijos. Pero también su mensaje es a las familias que sufren, a las familias con quiebres y dolor, todas caben en las redes del Señor, como rezó un lema de años atrás en los retiros de Punta de Tralca.

Estamos comenzando la semana de la familia, y queremos que cada familia pueda vivir este tiempo de algún modo especial, como un tiempo de misión familiar. El documento de Aparecida, recientemente publicado, tras el encuentro de obispos en la Conferencia Episcopal de Latinoamérica nos hace un llamado muy fuerte a actuar con audacia, y fortalecer la familia, a la que llama la pastoral de la vida.

Las lecturas de este domingo (Hab 1, 2-3; 2, 2-4/ 2 Tim, 6-8.13-14) y el evangelio de Lucas Lc 17, 3b-10 quizás nos resultan extrañas, nos dice el padre Pepe C.S.C. pues no están fundadas en el dar y el recibir, como lo es casi todo en la sociedad en la que vivimos. Nuestra fe no es una relación de intercambio, en la que si obedecemos a Dios recibiremos una recompensa, y en cambio si no lo hacemos recibiremos un castigo. Nosotros somos simples servidores, nuestra relación se basa en la amistad y la gratuidad del amor. A saber, la familia es la primera escuela de esa amistad y gratuidad. La familia es un hogar, un lugar de acogida, por lo que no se puede entender como un lugar sólo en donde imperen las normas, pues estas no son el fundamento de la familia.Es aquí donde aprendemos a relacionarnos con los demás, donde encontramos confianza y apoyo. Nuestra cultura privilegia la riqueza, la competencia y el triunfar, la familia en cambio es la escuela de valores, donde se privilegia la generosidad, el cariño, la fraternidad, el respeto, la solidaridad. Nuestros hijos aprenden mucho mas de lo que ven de nosotros, de la alegría que se puede encontrar en estos valores de amor y servicio.

Reavivemos este don que hemos recibido es la invitación del Padre Pepe C.S.C. Estamos concientes que existe mucho sufrimiento y dolor en la familia de hoy, y nuestro desafío es permitir que TODOS sin excepción puedan sentirse acompañados por el Señor, y así mismo descubrir que en los momentos difíciles podemos descubrir que son mas las cosas que nos unen que las que nos separan. Como nos decía el beato Padre Moreau C.S.C., el dolor puede ser llevado como un don. Todas las familias, pueden ser buenas familias, y en ellas buenas escuelas de fe.